Es necesario definir el problema (sucesos significativos y sus causas probables, así como los síntomas de esas causas). Definir objetivos: los de corto plazo están orientados a los problemas actuales; los objetivos de largo plazo están orientados hacia las estrategias. Generar alternativas: posibles y prácticas; para luego evaluarlas. Desarrollar un plan de acción: al elegir la alternativa evaluada, pasar al cuándo ponerla a funcionar, cómo, en qué orden.Asignar responsables de cada acción y comunicar a los posibles afectados. Evaluar el plan de acción implementado: conocer sus ventajas y sus inconvenientes, pensar como modificar los errores cometidos.
